Ante la presencia de casos de dengue en distintos lugares del país, la cartera sanitaria nacional difunde una serie de medidas para impedir la propagación de la enfermedad y detectar sus síntomas.
Con el próximo recambio turístico y el regreso de personas que veranearon en regiones con circulación activa del virus del dengue, el Ministerio de Salud de la Nación recuerda a la población las acciones a tener en cuenta para evitar nuevos casos y la propagación de la enfermedad en el país.
A los turistas que regresan y comienzan a presentar síntomas tales como fiebre y dolor detrás de los ojos, de cabeza, muscular y de articulaciones; náuseas y vómitos; cansancio intenso; aparición de manchas en la piel; picazón y sangrado de nariz y encías, la cartera sanitaria recomienda no automedicarse y acudir al médico lo antes posible para recibir un diagnóstico. No se debe tomar aspirinas, ibuprofeno ni aplicarse inyecciones intramusculares.
Con respecto a las medidas de prevención a desarrollar en los hogares, el ministro de Salud de la Nación, Jorge Lemus, afirmó que “la principal manera de prevenir el dengue consiste en evitar la reproducción del mosquito, por eso es importante eliminar todos los recipientes y gomas de los autos que puedan contener agua. El mosquito utiliza agua limpia presente en zonas con sombra o semisombra”.
El dengue se transmite por la picadura del mosquito Aedes aegypti. Cuando el mosquito se alimenta con sangre de una persona infectada con el virus de dengue y luego pica a otras les transmite esta enfermedad.
Muchos de los recipientes donde el mosquito se cría como latas, botellas, neumáticos, trozos de plástico o lona y bidones cortados que no son de utilidad tienen que ser eliminados. Si en cambio se trata de recipientes en uso, debe evitarse que acumulen agua, dándolos vuelta -baldes, palanganas, tambores- o vaciándolos en forma frecuente -portamacetas, floreros y bebederos-.
También es importante no arrojar recipientes o basura en patios, terrazas, calles y baldíos, en los que pueda acumularse agua; mantener los patios y jardines desmalezados y destapar los desagües de lluvia de los techos. Los tanques y recipientes que se usan para recolectar agua deben estar tapados y las piletas de natación limpias y cloradas.
A quienes se dirigen a zonas en donde circula el virus se aconseja el uso de repelentes y aplicaciones cada tres horas y en lo posible vestir con mangas y pantalones largos.
El contagio sólo se produce por la picadura de los mosquitos infectados, nunca de una persona a otra, ni a través de objetos o de la leche materna. Aunque es poco común que las mujeres embarazadas pueden contagiar a sus bebés durante el embarazo.
Otras enfermedades transmitidas por el mismo mosquito
El Aedes aegypti también es capaz de transmitir el virus de otras enfermedades presentes en los países limítrofes como la fiebre del zika y la fiebre chikungunya. Los síntomas de la primera consiste en fiebre leve, sarpullido dolor de cabeza, en las articulaciones y muscular; malestar general y conjuntivitis no purulenta que ocurre entre tres a doce días después de la picadura del mosquito vector, en algunos casos, puede producir complicaciones neurológicas.
El Ministerio de Salud de la Nación recomienda a los viajeros y, en especial a las embarazadas, que consulten previamente con su obstetra si viajan a zonas donde el virus zika se encuentra activo, y extremen las precauciones para evitar la picadura de mosquitos, debido al posible riesgo de malformaciones congénitas en gestantes que contraigan la infección durante el primer o segundo trimestre de gestación.
Por otro lado, la fiebre chikungunya se caracteriza por la aparición de fiebre, generalmente acompañada de dolores articulares. También puede presentarse con dolor muscular, de cabeza, náuseas, cansancio y erupciones cutáneas.
En ambos casos la recomendación es la misma que para el dengue: no automedicarse y acudir al médico lo antes posible.